Enfrentémoslo: los hombres son diferentes a nosotras y viven la vida sin preocupaciones o saben al menos cómo evitar hacerse mala sangre por cosas que no lo valen. Mientras que nosotras somos más rebuscadas, analizamos todo y pretendemos que ellos se tomen en serio cada cosa que decimos.
Sin embargo, ellos tienen hábitos frustrantes que nos suelen sacar de quicio y que no logramos entender, como los siguientes:
4 Síndrome de la heladera vacía
Si tu novio vive solo o con amigos probablemente ya hayas experimentado el síndrome de la heladera vacía. Eso suele suceder a menudo: los hombres solo tienen en su heladera condimentos, algunas rodajas de una pizza vieja y lo que solía ser una fruta o cualquier alimento que hayan dejado por mucho tiempo y que ahora es difícil de identificar.
¿Pero quiere decir que no comen? Claro que lo hacen, pero nosotras tendemos a comprar de antemano lo que necesitamos para el resto de la semana mientras que los hombres solo compran comida cuando tienen hambre. Obviamente nosotras somos más organizadas y muchas veces los choques en las parejas surgen a raíz de la comida.
Pero lo mejor es que ambos cedan, que nosotras seamos más espontáneas y que ellos sean más considerados ¡o que al menos tiren a la basura lo que se está pudriendo en la heladera!
Si tu novio vive solo o con amigos probablemente ya hayas experimentado el síndrome de la heladera vacía. Eso suele suceder a menudo: los hombres solo tienen en su heladera condimentos, algunas rodajas de una pizza vieja y lo que solía ser una fruta o cualquier alimento que hayan dejado por mucho tiempo y que ahora es difícil de identificar.
¿Pero quiere decir que no comen? Claro que lo hacen, pero nosotras tendemos a comprar de antemano lo que necesitamos para el resto de la semana mientras que los hombres solo compran comida cuando tienen hambre. Obviamente nosotras somos más organizadas y muchas veces los choques en las parejas surgen a raíz de la comida.
Pero lo mejor es que ambos cedan, que nosotras seamos más espontáneas y que ellos sean más considerados ¡o que al menos tiren a la basura lo que se está pudriendo en la heladera!
3 Adicción a los videojuegos
Los hombres pueden pasar horas y horas frente a una pantalla, ya sea mirando cualquier tipo de deporte o jugando algún videojuego. Y a nosotras nos puede gustar hacerlo e incluso podemos llegar a compartir esa actividad con ellos, pero la realidad es que no podemos pasar días pensando en pasar los niveles y vencer a los demás. Solemos aburrirnos y preferimos hacer otras cosas con nuestro tiempo libre.
Los videojuegos les dan a ellos la chance de relajarse sin moverse o hacer nada productivo. El juego es la actividad en sí y cuando arrancan a jugar, su espíritu competitivo los lleva a querer ir hasta el final y dedicar todo a ganarlo.
2 Nunca llegar a tiempoOtro hábito frustrante de los hombres es el de nunca llegar a tiempo. ¿Cuánto tiempo has esperado a que un chico te pase a buscar o que aparezca en el bar en el que habían quedado? Siempre pasa lo mismo: los hombres están destinados a llegar tarde.
Y no por el hecho de tomarse su tiempo para lucir de la mejor manera sino que esperan a lo último para aprontarse y lo hacen con una paciencia... ¡que nos dan ganas de matarlos!
1 No llamar
El hábito más frustrante de los hombres que siempre nos desespera es que ¡nunca llaman! Sales con un chico en una cita, pasan un buen momento, ambos se gustan y coquetean. Dice que va a llamarte luego pero no lo hace. Esto suele suceder a menudo y a veces por diferentes razones. Puede pasar que realmente no estaba interesado y, aunque duela, es la explicación más obvia.
También puede pasar que esté saliendo con otra y que haya coqueteado sin pensar en que pueda llegar a algo. Como a la vez puede suceder que se sienta inseguro, que no esté seguro de si le gustas o incluso que haya salido de una larga relación o le tema al compromiso. También puede darse que haya encontrado a otra chica.
No es fácil entender a los hombres o no enojarse o frustrarse con sus reacciones pero es parte de la relación. Después de todo nosotras también tenemos nuestros malos hábitos.
El hábito más frustrante de los hombres que siempre nos desespera es que ¡nunca llaman! Sales con un chico en una cita, pasan un buen momento, ambos se gustan y coquetean. Dice que va a llamarte luego pero no lo hace. Esto suele suceder a menudo y a veces por diferentes razones. Puede pasar que realmente no estaba interesado y, aunque duela, es la explicación más obvia.
También puede pasar que esté saliendo con otra y que haya coqueteado sin pensar en que pueda llegar a algo. Como a la vez puede suceder que se sienta inseguro, que no esté seguro de si le gustas o incluso que haya salido de una larga relación o le tema al compromiso. También puede darse que haya encontrado a otra chica.
No es fácil entender a los hombres o no enojarse o frustrarse con sus reacciones pero es parte de la relación. Después de todo nosotras también tenemos nuestros malos hábitos.
Fuente: Imujer
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