Una conmovedora fotografía, tomada por Enrique Cangas, está dándole la vuelta al mundo y en ella se observa al Arzobispo Jorge Bergoglio, ahora papa Francisco, siendo consolado por un joven de 16 años de edad durante un encuentro ecuménico en el estadio Luna Park de Buenos Aires, celebrado el 29 de junio de 2006.
Un periodista corresponsal del diario italiano La Stampa, Alver Metalli, le llamó particularmente la atención la fotografía en cuyo epígrafe estaba escrito: “La ternura… denota fuerza de ánimo y capacidad de compasión”.
El evento se trataba de uno de los tantos encuentros de oración entre evangélicos y católicos de los que Bergoglio participaba regularmente, primero como obispo y después como arzobispo y cardenal y aquel día, 7.000 personas se habían reunido para rezar juntos en ese tradicional estadio porteño.
El joven de la fotografía se llama Juan Francisco Taborda, tiene 22 años, como miembro de la Iglesia Adventista había asistido al encuentro en el Luna Park invitado por dos amigos.
El joven de la fotografia aseguró que luego de ese encuentro, se tropezó con el papa Francisco 2 veces más.
Lo llamativo de la historia es que, después de aquel día en que Bergoglio reclinó su cabeza en su hombro, Juan Francisco Taborda se reencontró con él, en dos ocasiones, sin reconocerlo como aquel mismo sacerdote junto al cual rezó en ese encuentro.
El segundo encuentro entre Taborda y el ahora Papa, ocurrió en el 2008 cuando Taborda como vigilante de un edificio, esperaba noticias sobre la salud de un primo a quien estaban operando y en ese momento un cura ingresó a la infraestructura y al notar su preocupación se acercó hasta él y se pusieron a hablar un rato.
“Se quedó allí un buen rato para darme aliento. No lo reconocí, no vi en él al sacerdote que había abrazado en el Luna Park. Me dijo que rezaría por mí, por mi primo, y me pidió el número de teléfono. Me transmitió una gran paz, es lo que más recuerdo. La paz y la energía que dicen sentir los adventistas cuando rezan todos juntos, yo las sentí con él en aquel momento. Una semana después, para mi gran sorpresa, me llamó por teléfono, realmente se acordaba de mi nombre y me pidió noticias de mi primo”, contó Taborda.
“Para mi gran sorpresa, me llamó por teléfono, realmente se acordaba de mi nombre y me pidió noticias de mi primo”, dijo Taborda.
Añadió que hubo un tercer encuentro entre ambos, un año después, en abril de 2009, en la catedral metropolitana de Buenos Aires. Estaba haciendo una investigación sobre sincretismo religioso y fue a la Catedral para repertoriar la iconografía del lugar. “En un momento, se me acerca de nuevo aquel sacerdote. Se acordaba de mí, de mi primo, me preguntó por él, y luego, cuando le dije por qué estaba allí, me hizo de guía en la catedral, dándome las informaciones que necesitaba”.
Como la gran mayoría de los argentinos, Taborda siguió la elección de Bergoglio y luego fue a festejarla a la Catedral aquel 13 de marzo a la noche. Cuatro días después, alguien subió la foto de Enrique Cangas a Facebook. “Cuando vi la fotografía me quedé sin aliento”, contó Taborda. Fue recién en ese momento que se dio cuenta de que el sacerdote, ahora Papa, que lo había consolado primero y guiado por la Catedral luego era el mismo que lo había abrazado en el encuentro del Luna Park.
Ahora, Taborda recuerda que, aquel día, Bergoglio le había pedido que orara él por los dos: “No quería ser él quien rezara; y me pidió que lo hiciera yo, y yo pronuncié una invocación al Señor para que nos acompañase y nos mostrase el camino…”
Fuente: Noticias24
Revisa la Guía de Comercios y
Servicios de Guárico y Aragua en: http://bit.ly/1dzmWMf
Agréganos al Pin de BlackBerry 22b1270a y recibe noticias, artículos, información, clasificados y más en tu teléfono, un máximo de 3 mensajes al día.
0 comentarios:
Publicar un comentario