Seguramente has escuchado que para bajar de peso es importante cenar temprano. Un estudio publicado en la revista médica “Obesity” descubrió una conexión entre comer muy tarde y la obesidad, pero cuando trabajas hasta las 9 de la noche y todavía haces una hora de camino a casa no tienes muchas opciones.
En lugar de irte a la cama rugiendo como león simplemente reconsidera tus opciones de comida. Concéntrate en buscar snacks de menos de 200 calorías y en combinar siempre proteína con carbohidratos. Estos son algunos ejemplos de lo que puedes comer:
Nueces y frutas
Un puñado de nueces con rebanadas de manzana o cubitos de papaya son una buena opción a cualquier hora.
Pan y jamón
Una rebanada de pan integral dos delgadas rebanaditas de jamón matan tu hambre, te quitan la ansiedad de comer y te ayudan a dormir mejor.
Hummus
Este dip preparado con garbanzo es alto en proteína y bueno para la dieta. Cómelo con galletas integrales.
Yogurt
El yogurt bajo en grasa es bueno a cualquier hora porque ayuda con la digestión pero también contiene proteínas.
Lo que debes evitar es la comida grasosa o con mucha azúcar, porque además de los problemas que le causan a tu dieta interrumpen tu sueño (lo que probablemente afecte).
Básicamente no te dejes ir por los antojos cuando ya es tarde. Si te mueres de ganas de comerte ese pedazo de carne que dejaste descongelando mejor póntelo de premio por despertarte temprano. Así dormirás más a gusto, comerás pesado por la mañana (que no es tanto problema) y tienes un incentivo extra para salir de la cama.
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